"Kerosene"
(1995) fué una
campaña con el objetivo de divulgar las identidades de los
paramilitares liberados con la Ley de Amnistía, a fin de
alertar a la población y contrarestar el silenciamiento impuesto por el gobierno. El plan era pegar en lugares céntricos
de
Lima autoadhesivos con los rostros y alias de los paramilitares liberados,
a manera de afiches de recompensa. La acción sería anónima y se repetiría
semanalmente, con un rostro nuevo. El proyecto fué apoyado por la
Asociación pro Derechos Humanos, APRODEH.
Los stickers llamaron la
atención del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), tras una investigación el
autor fué identificado y arrestado, la inmediata intervención de APRODEH y varios
congresistas facilitó su liberación a salvo momentos antes de ser derivado a
los cuarteles del SIN. El carácter clandestino y subrepticio de la campaña
motivó opiniones contrarias en otras organizaciones de derechos
humanos peruanas, las cuales juzgaron que semejaba una acción de un grupo
subversivo, lo que motivó el retiro del apoyo de APRODEH al proyecto y a
la defensa institucional al autor.
En los meses
siguientes el autor fue objeto de amedrentamiento por parte del SIN, vía
seguimientos y llamadas telefónicas con amenazas de muerte.